Este año tan diferente hemos empezado las Olimpiadas desde la ventana. Después hemos llenado los campos de alegría, gritos de ánimo, ilusión…¡Vivan las olimpiadas de Primaria! Un tiempo para aprender el valor de la competición y la deportividad, del trabajo en equipo, de la superación personal. Para aprender a ganar y a perder, a celebrar las victorias y a integrar la frustración de las derrotas, pero sobre todo, un tiempo para disfrutar.